LUCAS 15
(El nuevo proyecto de Xel Pereda y Nacho Vegas)
Sábado 15 de marzo, 21:00 h.
Teatro Cervantes (C/Santuario, 22)
15 euros
Anticipada en Café España (pza/Fuente Dorada, 8)
Entradas a la venta la próxima semana
«Probablemente el mejor trabajo de Nacho Vegas desde ‘Cajas de música difíciles de parar’ (2003) y ‘Desaparezca aquí'(2005)»
(Jesús Rodríguez Lenin – La Luna de Metrópoli)
«Uno de los trabajos más excitantes que ha deparado la música española»
(Jesús Miguel Marcos – Público)
Lucas 15 han doblado la apuesta que realizaron Los Planetas el pasado año. Si en 2007 los granadinos se sacudían los estúpidos complejos que atenazan a la escena musical independiente, apropiándose de las raíces flamencas para convertirlas, con la ayuda de sus influencias velvetianas y psicodélicas, en un nuevo y lisérgico discurso que superaba fronteras geográficas y mentales, ahora les ha llegado el turno a Lucas 15. El nuevo proyecto de Xel Pereda y Nacho Vegas nacía con una desventaja clara, ya que si bien J, Florent y compañía partían de un género universal como el flamenco, el tándem gijonés iniciaba su andadura con la idea de actualizar el cancionero popular asturiano, lo que entrañaba aún más dificultades. Por un lado, implicaba un trabajo de documentación mucho más severo y laborioso, dado que el número de grabaciones es bastante escaso y hay que recurrir a la tradición oral y a trabajos etnográficos. Y, por otro, debían acometer la casi imposible tarea de adaptar algunas de las estructuras de este cancionero a ritmos que fueran asumibles por el rock. Sin olvidar además que buena parte de estas canciones están cantadas en bable, lo que podía llegar a suponer una barrera más de cara al público más perezoso.
Aprovechando los pocos descansos que les concedía el calendario, plagado de innumerables conciertos y de colaboraciones junto a Enrique Bunbury y Christina Rosenvinge, Xel y Nacho afrontaron este reto con la ayuda de músicos de primer nivel: Manu Molina en la batería, Luis Rodríguez en el bajo y Chus Naves en piano y teclados, formando todos ellos una de las mejores alineaciones que ha dado nuestra escena. Después de más de dos años de trabajo, el tiempo y el esfuerzo han merecido la pena. Lucas 15 han superado con creces todas las expectativas depositadas en este proyecto, y apenas unas semanas después de su lanzamiento muchos especialistas consideran que este álbum es el mejor y el más valiente que se ha hecho en España en los últimos años. No seremos nosotros quienes les llevemos la contraria.
Iluminados por Nick Cave, Tom Waits y The Pogues, y con el eterno Dylan flotando en el subconsciente, Lucas 15 han abordado el cancionero tradicional asturiano con una solvencia que asusta. Una sección rítmica magistral sirve de columna vertebral para que guitarras eléctricas, acústicas y banjos se acomoden con brillantez y sin estridencias, y se releven con pianos y teclados resueltos con exquisitez. Sobre ellos, las voces de Nacho (encantadoramente distante) y Xel (enorme descubrimiento) narran estas historias que, pese a ser ancestrales, no pierden un ápice de vigencia al nutrirse del tuétano de la condición humana. El amor se presenta de las más diversas formas junto al miedo, la violencia y, por supuesto, la muerte.
Como bien dice la hoja promocional: ésta sí es la verdadera trama asturiana.