Sala Experimental del Teatro Zorrilla (Pza. Mayor, 9)
Entradas: 12 euros.
A la venta en el Café Teatro Zorrilla
Hay artistas que optan por la libertad creativa, por reinventarse en cada disco, por explorar las vías musicales mucho menos trilladas. A menudo estos reciben el reconocimiento de pocos pese a que sus composiciones estén dotadas de una calidad indiscutible. Y luego los hay que, a pesar de todo lo anterior, consiguen atraparnos y nos permiten entrar en su propio universo creativo. Poco a poco pero sin vacilar: sus melodías siempre llegan para quedarse. Y es que Abraham Boba lo ha conseguido una vez más, y por la puerta grande. «Los días desierto» es un disco que explora a la perfección esos sentimientos humanos que nos tocan a todos, desde el vacío de la soledad al amor.
Abraham, más conocido últimamente por acompañar a Nacho Vegas y ser uno de los protagonistas absolutos del último trabajo del asturiano, publica a mediados de marzo Los días desierto, su tercer álbum y el que ya podemos afirmar –a riesgo de caer en el tópico- que supone un antes y un después en su carrera. ¿Álbum de consagración? Desde luego lo es a nivel personal, pues logra con su pop de autor involucrarse hasta la médula en sus letras y en su música, pero seguramente también a nivel mediático. Boba no sólo cuenta y canta canciones, también las interpreta con su voz, piano, guitarra o acordeón. Historias personales escritas desde una óptica tan hiriente como tierna, un perfecto desdoblamiento de personalidad musical que no aspira a emular a nadie más que a uno mismo. Un universo musical propio, donde el pop, el folk y los referentes clásicos de un buen singer songwriter se funden en unas canciones que mantienen el ADN propio de sus discos anteriores pero en formato más eléctrico que nunca, y embellecido por coros y muchos más matices. En definitiva, Los días desierto destila todo aquello de lo que ya veíamos capaz a Abraham: sensibilidad musical, destreza instrumental y clase. Todos sabemos que los buenos discos son aquellos que precisan su tiempo de escucha, y el de Abraham es de esos. Pero también sabemos que precisamente esos son los discos que más nos cautivan, y a los que acabamos recurriendo casi compulsivamente. Sin duda, 2011 es el año de Abraham.
Formación:
Abraham Boba – piano, guitarra, voz
Pablo Magariños – batería y percusiones
Edu Baos – bajo
Alvaro Segovia – guitarra
Biografía
Para quienes aún no lo conozcan Abraham Boba es un artista vigués con años de experiencia en la música como compositor, intérprete y arreglista.
Comenzó como frontman de Tedium a mediados de los 90, para dedicarse posteriormente a la música instrumental con el dúo Belmonde, con quien editó un par de álbumes. Debutó como Abraham Boba en marzo de 2007 con un disco homónimo, que le permitió presentarse -tanto solo como con su grupo- en las salas del circuito y distintos festivales -BAM, Let’s Festival, South Pop, etc.-, además de grabar los programas de televisión Básico de Telemadrid y Los conciertos de RNE 3 de La2 de TVE. Después de año y medio de rodaje, y de importantes cambios, incluyendo de ciudad -de Barcelona a Madrid-, editó «La Educación», su segundo álbum, en 2009 que fue grabado de nuevo junto a su grupo y en directo. Nuevos retos y nuevas miras en el que una vez más las letras marcan la diferencia, ahondando en su papel de retratista de la sociedad que le ha tocado vivir, capaz de fundir reflexiones sobre lo que representa (o gustaría representar) con la huella de las relaciones y la crítica al conformismo vital. En este segundo álbum, su personalísimo pop de autor difícilmente clasificable deja de lado los ambientes jazzísticos y de swing para dar la bienvenida a un pop de salón que lo emparenta con Scott Walker, el Cohen de «Death of a Ladies Man» o Richard Hawley, disipando así los aires afrancesados y mediterráneos para dar paso a sonidos más emparentados con la tradición americana; aromas que se cuelan en sus composiciones gracias a la escucha en profundidad de clásicos como Elvis Presley, Gene Vincent o Nina Simone, pasando por Dylan o Neil Young y llegando hasta contemporáneos como Bill Callahan o Kurt Wagner. También hay acercamientos al gospel y hasta guiños a la música clásica, de la que es un ferviente entusiasta. Con «Los días desierto» sus melodías se tornan más luminosas y eléctricas. El disco ha sido grabado en los estudios «El cariño» de Zaragoza y en esta ocasión se ha dejado arropar por una banda sin mácula: Eduardo Baos (de Tachenko) al bajo, Pablo Magariños con las percusiones, la guitarra de Álvaro Segovia (ex Atom Rhumba) y colaboraciones como la de Charlie Bautista (Christina Rosenvinge) a la flauta. Las canciones parecen haber aprendido lo mejor de grandes clásicos del pop y del rock como Tim Hardin, Scott Walker e incluso Lou Reed.
Discografía:
«Los días desierto» (2011)
«La educación» (2009)
«Abraham Boba» (2007)
Domingo, 1 de mayo de 2011 – 20:30 h.
Sala Experimental del Teatro Zorrilla (Pza. Mayor, 9)
Entradas: 12 euros.
A la venta en el Café Teatro Zorrilla