
He probado la dieta de la ciruela, sin embargo defeco en exceso y se me irrita el hojaldre como a un gueises sesualmente hiperactivo; así que estoy intentando probar la Dieta de la Princesa, pero he llamado a Zarzuela para enterarme de los pasos a seguir para quedarme huesuno y famélico y me toman por un demente anarquista. A cambio de los secretos de la dieta, he puesto a su disposición mis conocimientos ginecológicos, e incluso he ofrecido mis expertas manos para que extraigan a esa segunda criatura del vientre materno y así de paso rememoraba esos hermosos tiempos en que cada uno de mis dedos recorría a Ana en sus alumbramientos…mmmmmmmmmmm. Pero no ha habido manera, y creo que optaré por dejar las dietas para perpetuar mi régimen, que es lo que realmente me pone.
¿Qué dieta recomendarías a nuestro amigho Javi?