Hola, muchachada:
Os enseño aquí una foto que me hicieron el año pasado con unas chicas la mar de simpáticas. No eran especialmente guapas, y algunas eran incluso más peludas que mi amigo Manolo (el bigotoide que está a mi lado), pero la elegancia y colorido de su vestuario merecía una foto con ellas. Hay algunos asesores míos que me dicen que en realidad esas mujeres no son mujeres, sino dracuíns, que son algo así como invertidos gueises pero vestidos de mujer de moral lijera. Pero están totalmente equivocados: mi instinto no me engaña. Cuando nos hicieron la foto tuve un calentón viendo tanta carne hembril y tanto pezón sugerente, que tuve que llevarme la mano a la huevada para disimular el morcillote que me agarré.
Os enseño aquí una foto que me hicieron el año pasado con unas chicas la mar de simpáticas. No eran especialmente guapas, y algunas eran incluso más peludas que mi amigo Manolo (el bigotoide que está a mi lado), pero la elegancia y colorido de su vestuario merecía una foto con ellas. Hay algunos asesores míos que me dicen que en realidad esas mujeres no son mujeres, sino dracuíns, que son algo así como invertidos gueises pero vestidos de mujer de moral lijera. Pero están totalmente equivocados: mi instinto no me engaña. Cuando nos hicieron la foto tuve un calentón viendo tanta carne hembril y tanto pezón sugerente, que tuve que llevarme la mano a la huevada para disimular el morcillote que me agarré.